El chisporroteo de la mandarina especiada despierta una energía sin límites. Un nombre magnético que evoca poder y luz. Una fragancia que despierta fascinación a su paso, como las nubes deslumbrantes y extravagantes que tanto cautivan a la humanidad.

Para capturar esa energía estimulante, el maestro perfumista eligió la mandarina siciliana. Un ingrediente de una calidad tan excepcional, infunde el corazón del perfume con una frescura etérea, resonando al entrar en contacto con un trío de pimientos. Como firma, el vetiver de Java revela sus facetas más nobles, a la vez frescas, terrosas y ambarinas, completando el encanto. Al fusionar elementos del cielo y la tierra, Maison Alhambra Matiere revela una elegancia contemporánea que no conoce límites.